In Flames. Solo para los débiles. Vdln 23

¿Estoy obligado  a tener algún remordimiento?
Me he convertido en la mentira, hermosa y libre
En mi honrada mente
Adoro y predico la locura que me diste

Véndeme a la infección
Es solo para los débiles
No la necesito para comprender
La miseria que soy

He perdido la habilidad para pintar las nubes
Porque es a mi a quien estas consumiendo
Estoy atrapado en esta oscura historia a cámara lenta
Por que cada vez que corres...Me quedo atrás
¡Me quedo atrás!

Y entonces escucho de nuevo mi voz
El cuento del hombre amargado que soy
Agita el silencio y escucha lo que dice
El tranquilo orgullo que se convirtió en mentira.

Véndeme a la infección
Es solo para los débiles
No la necesito para comprender
La miseria que soy

Véndeme a la infección
Es solo para los débiles
Sobre rodillas sangrantes...
Oh, acepto mi destino.


Septiembre es tiempo de reencuentros. Tras el periodo oficial de vacaciones, toca regresar a la rutina, a la casa, a los amigos, al trabajo; a las obligaciones que dejamos estacionadas en prohibido, en aquellos días en los que el calor se convertía en enemigo del rendimiento.

Septiembre se transforma también en el territorio predilecto de los seres nocivos. Esos que con tanta expresividad como carencia de rigor, calificó Bernardo Stamateas de personas tóxicas. Animales que salieron de fábrica con el vicio de la infelicidad y con el don de convertir en víctimas a los oferentes de afecto. Si cambias, traicionas; si permaneces, aburres. Profesionales del chantaje emocional capaces de contagiar problemas, con la misma facilidad con la que se traspasa un quiosco de chuches a la puerta de un colegio de primaria. Desconocen el verbo disfrutar y gozan impidiendo que el resto lo conjuguen. Siempre negativos que diría Van Gaal.

(Los impacientes que empiecen en el segundo 50 y se ahorran el discurso de Anders)

Nadie, como In Flames en su famoso "Only for the weak", ha dibujado con notas musicales el perfil de tan indeseables compañías. " Véndeme la infección, es solo para los débiles".

Desde el reciente abandono del guitarrista Jesper Strömblad ( su adicción al alcohol tuvo la culpa), no queda en la banda ninguno de los miembros originales. Poco importa. Estos capos del death metal melódico, se convirtieron,desde hace años, en el jardín privado del cantante Anders Fridén. Dotado de una prodigiosa voz grave, domina con igual soltura el canto convencional y los sonidos guturales. Agrade o no el estilo, un superdotado. Coleccionista confeso de whiskys de reserva (no es metáfora malintencionada) y forofo futbolero del Goteborg , compone unos textos profundos, reflexivos y ricos en matices. Impropios, según un desafortunado titular de la prensa sueca, del género que practican. Otra vez los estúpidos prejuicios que escuchan ruido donde solo habita la armonía.

En octubre visitan España. De momento y en orden cronológico para evitar suspicacias territoriales,  Madrid, Zaragoza y Barcelona. Si mi proveedora oficial de entradas se porta como debe  y la puta palmera lo permite (otra vez la Riviera), allí estaremos pegando unos saltos. De momento, comienzo unas tan cortas como inmerecidas vacaciones. Dejo para la vuelta el encuentro con esos seres infectados que sirven de inspiración a In Flames. 

Espero que los suecos resulten de su agrado. A mí me encantan. Buen finde, buena semana. Disfruten ambas con salud y en libertad.