Germán Coppini. Fiesta de los maniquies. #VDLN 97.


Hay momentos, meses, periodos, en los que el destino parece ajustarnos las cuentas. Vaya semanita. Dos viajeras argentinas asesinadas por las buenas en Ecuador, unos pistoleros malnacidos se cargan en Honduras a Berta Cáceres y una tarada se pasea durante horas por Moscú con la cabeza de una niña bajo su brazo. Nadie intervino, solo miraban. Las autoridades tranquilizan a los rusos: no se intuye finalidad política. Menos mal. La decapitación de un infante no pinta lo mismo si se realiza en el nombre de alguna causa proscrita que si sucede por la simple locura de una tiparraca con malos sentimientos; como si los criminales de Al Qaeda, de la policía castrista o del ejército de la OTAN, hubieran andado alguna vez en sus cabales. Buffff. A ratos qué agobio, a ratos qué mal me siento; estoy enfermo, cómo envejezco.



Será por alguna de esas escenas olvidadas que nunca terminan de abandonarnos, o porque como en la historia de Hansel y Gretel, hay días en los que todo sale mal, en los que apetece dar una vuelta, pero la lluvia se empecina en lo opuesto.



Y encima lo del Congreso. Mi padre suele repetir con insistencia una vieja frase cuya autoría desconozco: “Dios da a cada pueblo los gobernantes que se merece”. Serán mis habituales discrepancias con la divinidad, pero sospecho que se le ha ido la mano con nosotros. Vaaaaale. Nos acostamos tarde, hablamos a voces y somos un poco más zánganos que los bárbaros del norte. Bueno, bastante. La culpa en el fondo la achaco a la literatura. Nos leímos el Lazarillo de Tormes y lo asumimos como evangelio nacional. Ya es mala suerte que una sociedad tan despreciativa con las letras, eligiera una novela como estandarte. También elevamos a disciplina artística la universal cualidad de la hipocresía; nos rasgamos los trajes por la injustificable masacre de Israel en Palestina, cuando los ancestros, los nuestros, expulsaron de su tierra a los sefardíes o los mandaron a la hoguera para quedarse con su pasta. Pero ni por esas se justifica padecer en carne propia las diez plagas. Primero las aguas se nos convirtieron en sangre; después llegaron las ranas, los piojos, las moscas, la peste del ganado, las úlceras, el granizo y la langosta. Sumergidos ahora en un mar de tinieblas, a ver si para la décima, el ángel del Señor se muestra compasivo y marca con un aspa los domicilios de los decentes. Si es tan bueno como lo pintan los cristianos, va siendo hora de que se estire con un detalle y nos libre de esta fiesta de los maniquies.



A veces en sueños me identifico con alguno de ellos, entablo amistad con fantasmas y visiones, y siembro el terror entre los pobres de espíritu. Hasta que me reconozco como una parte más de esa A Santa Compaña que camina por la vida acojonando a la aldea y recupero sobresaltado la conciencia. Mi terapeuta sostiene que casi todos los diablos personales nacen en la infancia. Mal lo debí pasar en algún instante borrado del recuerdo, porque es comtemplar la faz del príncipe de la corrupción, del galán vacío de telefilme americano, del yerno perfecto o del intelectual progre de diseño contemporáneo, y asomarse a mi cerebro una vieja estrofa de Germán Coppini: no mires a los ojos de la gente, me dan miedo, mienten siempre.



Todo es un problema de inadaptación social, de tardía ingenuidad juvenil. Vaya ocurrencia la de recuperar los vicios de aquel aprendiz de poeta que un día fui, en un momento en el corren tan malos tiempos para la lírica.

Al contrario que cierto chulo de importación al que la noche confundía, a mi me serena. Me restituye las esencias. Aliado con las soledades de la oscuridad, el tiempo parece detenerse y los males se tornan menores. Por unas horas todo se vuelve armonía.



Por la mañana, despierto como si me hubiera acostado con la Kathleen Turner de fuego en el cuerpo. Los músculos desobedecen y la razón emparenta con la holganza. Un obsequio de la puñetera mirtazapina, supongo. Me levanto y reviso con esmero la colección de moscas. La guardo en una cajita junto a la mesilla. Conservo ejemplares pequeños, también otros más grandes. Los segundos se comen a las otros cuando el hambre crece. Aunque hasta ahora lo mantuve en secreto, colecciono moscas… pero no estoy loco. No se alarmen, ya saben que soy del Atleti.

Espero que resulte de su agrado este viaje repartido en enlaces por la carrera de Germán Coppini, incluido el álbum póstumo del que se extrajo el último videoclip. Fue un tipo raro, honesto. Un heterodoxo de esto de la música. Un gallego de Santander que abandonó Siniestro Total para centrarse en un proyecto propio. Lo bautizó como Golpes Bajos; después lo enterró para emprender trayectoria en solitario. Un hombre divertido con una capa de melancolía que tuvo la ocurrencia de morirse en la desde entonces triste Nochebuena de 2.013. Nunca se lo perdonaremos.

Feliz #VDLN, feliz semana. Como siempre, salud y libertad.

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Comentarios

  1. Muy profundo y sincero. Yo suelo vivir en mi mundo o por lo menos eso me dicen. Pero es una manera de escapar supongo de la maldad y la hiprocresia humana. Intento buscar, ver el lado bueno de las cosas. Aunque cuando no lo encuentro es un poco fustrante. Pasa buen finde!!

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    1. Yo también intento vivir en mi mundo, pero no siempre lo consigo. Feliz semana, gracias por el comentario.

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  2. Que paren el mundo que yo me bajo. Vaya espetáculo estamos viviendo.

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  3. no estás enfermo.es el estupor del ser ante el sinsentido. nos ocurre a muchos,pero solo nos queda la sensación de vértigo, de náusea profunda. no comprender porqué hemos sido arrojados a esta cruel y estúpida bola, llamada tierra que gira y gira, completamente ajena al sufrimiento.
    Hablando de lo otro, sinceramente rafa, ¿tu crees que es por leer el lazarillo, somos como somos?. ¿tu crees que en este pais de analfabetos funcionales alguien ha leido el lazarillo? , ¿sabrá











































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































    a algún polítco quién es el lazarillo? . si alguien lee el lazarillo , no sé si aprenderá sus pillerías, pero seguro que algún regusto estético , al menos, le queda. lo
    nuestro, es más trágico , va en los genes . ¿adaptación al medio , durante gneraciones y generaciones?, ¿mutación genetíca?...¡quién sabe¡. tu padre, tiene razón, tenemos el gobierno que merecemos,no se si por castigo divinio, o por ingeniería social. somos el país del "vivan las caenas", cuando el rey felón, y hasta ahora. ¡ha¡ si te consuela yo colecciono esquelas desde niño. un saludo y buen finde

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    1. perdón, no sé lo que he hecho que me ha quedado un tremendo espacio en blanco.

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  4. no estás enfermo.es el estupor del ser ante el sinsentido. nos ocurre a muchos,pero solo nos queda la sensación de vértigo, de náusea profunda. no comprender porqué hemos sido arrojados a esta cruel y estúpida bola, llamada tierra que gira y gira, completamente ajena al sufrimiento.
    Hablando de lo otro, sinceramente rafa, ¿tu crees que es por leer el lazarillo, somos como somos?. ¿tu crees que en este pais de analfabetos funcionales alguien ha leido el lazarillo? , ¿sabrá











































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































    a algún polítco quién es el lazarillo? . si alguien lee el lazarillo , no sé si aprenderá sus pillerías, pero seguro que algún regusto estético , al menos, le queda. lo
    nuestro, es más trágico , va en los genes . ¿adaptación al medio , durante gneraciones y generaciones?, ¿mutación genetíca?...¡quién sabe¡. tu padre, tiene razón, tenemos el gobierno que merecemos,no se si por castigo divinio, o por ingeniería social. somos el país del "vivan las caenas", cuando el rey felón, y hasta ahora. ¡ha¡ si te consuela yo colecciono esquelas desde niño. un saludo y buen finde

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    1. No me atrevo a decir si el rollo de la picaresca es causa o efecto, pero que no nos beneficia lo tengo claro. Tuve compañeros de curso que llegaron a fingir que copiaban para no ser "los tontos de la clase". Hablando de otra cosa, vaya comentario raro que te ha salido. Te quedó un montón de espacio grande en blanco entre dos palabras. Buen finde.

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  5. perdón otra vez amigos. no se que coño he hecho. cuando di el enviar , y vi el mar en blanco que había dejado , casi , me da un soponcio. es culpa de mi impericia con estos malditos aparatos.casi estoy por dimitir de mi incipiente carrera , como contestador o comentarista o como se diga en el "argot", de "blogs". ademas me leo y me averguenzo de mi mismo.soy un auténtico disparate. os seguiré leyendo y aprendiendo de vosotros , en especial del maestro. gracias atodos

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    1. Hombre no es para tanto. Esas cosas nos suceden a todos. La tecnología que aveces no resulta tan perfecta como creemos. Gracias a ti.

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  6. Al Principio no caía en su sonido pese a reconocer los nombres del grupo y del músico, pero es darle a escuchar y saberme las canciones, sobre todo "No mires". Lo tenia en algun lado de la memoria, y me ha gustado recuperarlo. De lo demás no hablo, estoy saturada del esperpento cotidiano, tanto fuera como dentro de nuestras fronteras...ufffff.

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